jueves, 7 de diciembre de 2006

Kilometros metricos


En el Royal se puede desandar lo andado. Se puede presumir delante de una copa de vino tinto de Borgoña, y dejar que pasen las horas y se borren los kilométricos. Aveces quisiera abismarme en una de sus sillas, recostarme a la barra y navegar hacia los paisajes de los muros.
Con el frio, el banco en que me meci se fue quedando sin velas y sin luz...

Ahora solo lo admiro al otro lado de la calle, como una vision de lo que fui...

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Uno que desanda solo en el Royal, otro que escucha pasos en el edificio a las 3 de la mañana y otro que escribe "a bocanadas se da la soledad escribiendo" (C. de la O). Desandar. Pero ni desandando llegamos al mismo punto.

Un abrazo Luisigno...
Silvia

Silvia Piranesi dijo...

por dónde andas?